Cada vez más personas adultas experimentan dificultades para conciliar el sueño o mantener un descanso reparador durante la noche. Aunque las causas pueden ser variadas, diferentes estudios señalan que ciertos hábitos de vida y descanso tienen una influencia directa en la calidad del sueño, interfiriendo en el equilibrio del sistema nervioso y el sistema endocrino.
Cómo conciliar el sueño
Para entender de qué manera la herramienta Aquilea OnBalance Sleep puede contribuir a mejorar la conciliación del sueño, es importante comprender que el proceso de quedarse dormido involucra varios mecanismos fisiológicos regulados por el sistema nervioso y otros factores biológicos:
- La regulación del ciclo circadiano será clave para una correcta secreción de melatonina, hormona que induce el sueño. Esta hormona la produce la glándula pineal y aumenta durante la noche en respuesta a la ausencia de luz natural, por tanto, hay que tener muy en cuenta que la exposición a la luz artificial, sobre todo la luz azul, altera la producción endógena de esta hormona y por consiguiente desregula el reloj biológico interno.
- Durante el sueño se activa el sistema nervioso parasimpático y esto hace que se reduzcan la frecuencia cardíaca, la presión arterial y la respiración, creando una situación propicia para conciliar el sueño. Por tanto, toda actividad que implique una sobre estimulación del sistema nervioso simpático en horas cercanas al descanso, va a interferir en este. Por ejemplo, realizar ejercicio a partir de las 8 de la tarde, estudiar hasta altas horas de la noche o el estrés crónico serán algunos de los factores que interfieran en el proceso natural de conciliar el sueño.
Se recomienda adquirir rutinas de relajación que se puedan realizar antes de acostarse para activar el sistema nervioso parasimpático:
- Meditación
- Lectura amena
- Masaje relajante
- Ducha de agua caliente
- Infusiones relajantes de melisa, pasiflora, lavanda o camomila
- Cuando el cuerpo se prepara para dormir, disminuye la actividad de la corteza cerebral y las ondas cerebrales pasan a un estado de baja frecuencia.
Por tanto, para poder tener un descanso reparador será necesario reducir la exposición a los procesos cognitivos que puedan activar la corteza cerebral. Por lo general, estos procesos están relacionados con estímulos del entorno (visuales, auditivos, táctiles), pensamientos, emociones, recuerdos, comunicación, estrés, actividad física y aprendizaje. - La intervención de ciertos neurotransmisores será definitiva en la regulación del sueño.
El GABA es un neurotransmisor que promueve la inhibición de la actividad cerebral y favorece la relajación y el sueño. La adenosina también genera somnolencia, por lo que la acción de ambas en conjunto induce el sueño.
La serotonina también es un neurotransmisor que juega un papel importante en el ciclo del sueño, dado que es precursora de la hormona melatonina, que, como ya se ha mencionado, es la principal encargada de inducir el sueño.
Consejos para mejorar tu sueño con Aquilea OnBalance Sleep
Después de hacer este pequeño repaso nos será más sencillo entender los beneficios que nos aporta la herramienta Aquilea OnBalance Sleep para regular los procesos implicados en el ciclo del sueño y por ende a mejorar nuestro descanso, crear hábitos de higiene del sueño y en consecuencia favorecer un organismo sano y equilibrado.
Aquilea OnBalance Sleep está compuesto por ingredientes de origen natural en un 99,9 %:
- El extracto de Ashwagandha Sensoril es uno de los extractos de ashwagandha más investigados y estandarizados en el mercado, conocido por su uso tradicional como adaptógeno. Se ha estudiado por su capacidad para ayudar al organismo a gestionar mejor las situaciones de estrés. Su uso puede estar asociado a una mayor sensación de bienestar general y a una mejora en la calidad del descanso.
- La metatonina es una hormona imprescindible en el ciclo del sueño. Aunque nuestro organismo tiene la capacidad de sintetizarla de manera endógena, como ya hemos visto previamente, hay muchos factores que pueden alterar esta producción endógena.
Agregar melatonina de manera exógena (externa) mediante suplementación poco antes de irnos a dormir nos ayuda a regular los niveles de esta hormona en el organismo y facilitar así que se puedan llevar a cabo los mecanismos fisiológicos propios para conciliar el sueño.
- La vitamina B6 es una vitamina hidrosoluble que resulta esencial para que se lleven a cabo muchas funciones metabólicas y biológicas en el cuerpo.
Además de ser una pieza clave para el metabolismo de proteínas, carbohidratos y grasas en el organismo, haciendo que dispongamos de energía cuando se requiera, también participa en la síntesis endógena de neurotransmisores como la serotonina, la dopamina, o el GABA, que ya hemos dicho que tendrán un papel protagonista en la regulación del estrés, en favorecer la relajación y mejorar la calidad del sueño.
Esta vitamina también está implicada en la producción de mielina, la capa protectora de los nervios (también de las neuronas) y esto será determinante para una correcta función cognitiva. - Aceites vegetales especialmente ricos en omega-6, y también contiene omega-3 y omega-9. Por ejemplo, el aceite de semilla de cáñamo, que ofrece múltiples beneficios para la salud general.
En definitiva, hay muchos hábitos que podemos y deberíamos incorporar en nuestra rutina para mantener una correcta higiene del sueño que favorezca un descanso reparador. Aun así, si a estos pequeños cambios les sumamos una ayuda extra, como las cápsulas Aquilea OnBalance Sleep, estaremos promoviendo que nuestro organismo se recupere adecuadamente durante la noche y que despertemos con la energía necesaria para afrontar el día. Además, lo estaremos haciendo con un cómodo formato gominola, apto para veganos y sin lactosa, azúcar ni gluten. ¿A qué esperas?